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Austrinus es el sitio de astronomía de Farid Char.
Este espacio fue inaugurado el 25/11/2000 y su nombre significa “austral” o “del sur”, en latín.

Este nombre sirve para identificar mejor el origen de sus contenidos, creados desde el hemisferio Sur: 23°39' S y 70°25' O (Antofagasta, Chile).

En astronomía, el nombre está presente en la constelación Piscis Austrinus.


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Espacio profundo

Nebulosas

Nebulosa Ojo del Gato

Las nebulosas son enormes formaciones compuestas principalmente por polvo y gas interestelar, que adornan el espacio como remanente de procesos naturales en las estrellas, como puede ser una explosión supernova, o las últimas etapas de una estrella que se habrá de convertir en enana blanca, quedando a su alrededor una nebulosa planetaria.

Las nebulosas pueden clasificarse según los procesos que le dieron origen, o bien según el origen de su luminosidad, como se verá descrito más abajo.

La apariencia de una nebulosa semeja una “nube” o “neblina” (de ahí su nombre), aunque este término antiguamente se aplicaba a muchos objetos “borrosos” que hoy sabemos no son nebulosas (sino galaxias), debido a que los instrumentos del pasado sólo dejaban ver “manchones” de luz, en el caso de objetos más lejanos y débiles.

Algunas nebulosas notables

Nebulosa Cabeza de Caballo

Además de las nebulosas mencionadas, existen otras llamadas “oscuras”, cuya tonalidad opaca que no deja ver las estrellas del fondo; algunos ejemplos son la nebulosa Cabeza de Caballo y el Saco de Carbón, en la Cruz del Sur.

Entre las nebulosas planetarias, algunos ejemplos muy atractivos para su observación son la nebulosa de la Hélice (NGC 7293), nebulosa del Anillo (Messier 57) o nebulosa Dumbbell (Messier 27); en el caso de remanentes de supernova, destaca la nebulosa del Cangrejo, cuya supernova fue vista por astrónomos chinos en el 1.054 d.C.

Tipos de nebulosa según su estructura

Nebulosa Hélice

Nebulosas Planetarias: Son aquellas asociadas a estrellas que están en las etapas finales de su vida, agonizando en un desprendimiento y expulsión de sus capas de material de una forma que al verla por telescopio semeja un planeta (de ahí el término “planetaria”, pues no tiene nada que ver con los planetas), pues el polvo y gases despedidos engloban a la estrella moribunda, en cuyo centro queda un tipo de estrella denominada enana blanca, únicamente sostenida por la repulsión entre electrones.

Nuestro Sol, de hecho, se convertirá en una enana blanca con una nebulosa planetaria alrededor, hacia el final de su vida en unos 5.000 millones de años.

Nebulosa del Cangrejo

Remanentes de Supernova: Son aquellas que corresponden a lo que queda (de ahí el término “remanentes”) después de una explosión Supernova. Por esta razón tales nebulosas suelen tener forma irregular o “desordenada” (pues literalmente es el resto de una explosión caótica), se encuentran en menor cantidad pero son una interesante fuente de estudio debido a que son radiofuentes muy intensas, lo cual es resultado de la explosión que las formó.

Ejemplos comunes de remanentes de supernova es la nebulosa del Cangrejo, o el remanente de supernova en la constelación de la Vela.

Tipos de nebulosa según el origen de su luminosidad

Nebulosas de emisión: Son aquellas cuya luminosidad y radiación es emitida por la misma nebulosa, es decir de sus propios polvo y gases que están ionizados (es decir con sus electrones arrancados producto de la alta temperatura).

Un ejemplo de este tipo de nebulosa es la conocida M42, o Gran Nebulosa de Orión (visible incluso a simple vista), zona en la cual se están formando estrellas nuevas. Muchos de estos objetos son bastante llamativos y ofrecen muy interesantes vistas a través de un telescopio.

La imagen del costado muestra a la nebulosa de emisión Thor’s Helmet (NGC 2359).

Nebulosas de reflexión: Son aquellas cuya luminosidad no proviene de la misma nebulosa, sino que reflejan la luz de estrellas cercanas (análogamente, lo que serían los planetas reflejando la luz del Sol).

Un ejemplo de este tipo de nebulosa es el conocido cúmulo M45, las Pléyades, que reflejan la potente luz de las estrellas circundantes.

La imagen del costado muestra la nebulosa de reflexión Cosmic Keyhole (NGC 1999).

Nebulosas oscuras: Son aquellas cuyo polvo y gases tienen una tonalidad muy oscura, emitiendo muy poca luminosidad y más bien “tapando” las estrellas del fondo, pues en el cielo se la ve como una “mancha oscura” que no deja ver nada más allá de ella.

Un ejemplo de este tipo lo vemos en el Saco de Carbón, justo al lado del principal asterismo de la constelación Cruz del Sur, como se aprecia en la imagen del costado.

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